-. A raíz de los sucesos de la Pza. De Catalunya, se escucharon algunas voces – con poder – que han pretendido criminalizar al movimiento del 15 M.
No creo que por la acción de unos pocos, se pueda meter en el mismo saco a todo el movimiento ni mucho menos, pero por la misma razón, tampoco desde el 15 M se debería promover el hacer creer que todos los políticos son iguales o que todos los políticos son unos ladrones.
Quién se dedica a la política no es diferente del resto de las personas y la mayoría son personas honradas que defienden al ciudadano/a. Lo que hagan unos pocos no ha de permitir colgarle la etiqueta de proscrito al resto.
Tampoco creo que se deba despreciar la democracia que tenemos, con todos sus defectos de funcionamiento, es la que nos permite opinar y manifestarnos si creemos que algo no funciona y eso es LIBERTAD.
-. Por otra parte, a pesar de estar de acuerdo en las denuncias que desde el 15-M se hacen de algunas injusticias, tengo dudas respecto a como intentarán plasmarlas.
Las asambleas están muy bien pero tienen defectos manifiestos, entre ellos la dificultad de concretar, aún así, si logran lanzar alguna propuesta, me pregunto ¿como la van a llevar a cabo?, ¿Quién se responsabilizará y dedicarà tiempo y esfuerzo? Cuando se diera una hipotética negociación -sobre alguna propuesta- con los poderes públicos ¿Alguien podría decidir o se tendría que consultar una y otra vez a las diferentes asambleas? ¿Si una mayoría esta de acuerdo con una propuesta, la minoría dejará la asamblea?
No pretendo ser populista, pero si desmitificar el poder de la asamblea, que en pequeña escala tine razón de ser, pero a gran escala pierde la pierde.
-. He de reconocer que el movimiento 15-M, me genera contradicciones, por un lado me alegra ver gente preocupada socialmente, pero por otro lado, no puedo evitar preguntarme ¿donde estaba, cuando no había crisis, toda la gente que pretende hacer política ahora,?
Temo incluso, que una buena parte de las personas que ahora se manifiestan (con todo su derecho), hace un tiempo se declaraban apolíticas o decían que la política no les interesaba para nada y no puedo dejar de hacerme la pregunta anterior con un regusto amargo, porque mucha gente organizada en partidos políticos o sindicatos que han intentado mejorar el país , desde la visión que tuvieran, habrían agradecido las aportaciones de todos aquellos que realmente pretenden cambiar las cosas y hacer que en nuestro país, en el mundo, se viva mejor .
Sin embargo, como soy un optimista irredento, espero que todas esas personas que ahora están moviéndose, ayuden a que las organizaciones políticas y sindicales (tal vez anquilosadas) a funcionar mejor , a hacer mejores propuestas, a renovarse y en resumen a hacer mejor política y la mejor ayuda posible, es participar en ellas.